Las rabas son uno de los platos más populares en Canarias, especialmente en las Islas Canarias, y se preparan con una mezcla de verduras y pescado, que se fríe y se sirve con patatas fritas, ensalada o arroz. Esta receta es una de las más antiguas de la cocina canaria y se ha convertido en una de las favoritas de los amantes de la comida tradicional. Si quieres preparar unas ricas rabas tiernas y crocantes, aquí te explicamos cómo.
Ingredientes
Las rabas se preparan con una mezcla de verduras y pescado. Para hacerlas necesitarás los siguientes ingredientes:
- 2 cebollas blancas
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 1/2 calabacín
- 1/2 tomate maduro
- 1/2 kilo de pescado blanco
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Harina
- Aceite para freír
Preparación
La primera cosa que debes hacer es lavar bien todas las verduras y cortarlas en trozos. Luego, pica los ajos y mezclalos con la cebolla picada. A continuación, pon en una sartén el aceite de oliva y añade la cebolla y los ajos. Saltea los ingredientes a fuego medio durante unos minutos hasta que la cebolla esté tierna.
Agrega entonces los pimientos, el tomate y el calabacín y continúa salteando todos los ingredientes hasta que estén bien cocinados. Cuando todas las verduras estén listas, agrega el pescado y sazona con sal y pimienta. Cocina el pescado durante unos minutos hasta que esté bien hecho.
Una vez que el pescado esté listo, retíralo de la sartén y déjalo enfriar. Luego, pon el pescado en un plato y agrega harina para cubrirlo. A continuación, fríe el pescado en aceite caliente hasta que esté dorado y crujiente. Una vez hecho, retíralo del aceite y déjalo en un plato con papel de cocina para absorber el exceso de aceite.
Las rabas están listas para servir. Puedes servirlas con patatas fritas, ensalada o arroz, según tu gusto. Disfruta de unas ricas rabas tiernas y crocantes.
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Preparar los ingredientes
Lo primero que hay que hacer para preparar unas ricas rabas blandas es reunir los ingredientes. Necesitas un kilo de rabas, una cucharada de sal y una cucharada de aceite. Además, si quieres darles un toque especial, puedes añadir algunas especias como el ajo en polvo, el pimentón o la nuez moscada.
Cocinarlas en una olla
Una vez tengas los ingredientes preparados, pon una olla a fuego medio con un chorrito de aceite. Cuando esté caliente, agrega las rabas y remuévelas con una cuchara para que se impregnen bien. Añade la sal y las especias y mezcla bien.
Dejar cocer a fuego lento
Ahora, baja el fuego y deja que las rabas se cocinen a fuego lento. Deja cocinándolas durante unos 25-30 minutos y remuévelas de vez en cuando. Si notas que se están quemando, baja el fuego todavía más.
Servirlas
Cuando estén listas, apaga el fuego y sirve las rabas con una guarnición de tu elección. ¡Listo! Disfruta de unas ricas rabas blandas.
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Descongelar las rabas
Es importante descongelar las rabas antes de freírlas. Esto se puede lograr de dos formas: en el microondas o en el refrigerador. Si usas el microondas, recomiendo calentarlo a baja potencia. Al hacerlo, tendrás que verificar de vez en cuando para asegurarte de que las rabas no se derritan. Si descongelas en el refrigerador, deberás dejar las rabas descongelando durante al menos 8 horas.
Agregar aceite a la sartén
Una vez descongeladas las rabas, es necesario agregar aceite a la sartén. Recomiendo usar aceite de oliva o de canola, ya que son excelentes para freír. El aceite debe estar caliente antes de añadir las rabas. Esto se logra prendiendo el fuego a fuego medio y esperando a que el aceite se caliente.
Freír las rabas
Una vez el aceite esté caliente, puedes agregar las rabas a la sartén. Debes moverlas constantemente para asegurarte de que se cocinen uniformemente. Freírlas demasiado tiempo puede hacerlas demasiado duras, así que averigua el tiempo exacto necesario para que queden listas.
Retirar las rabas de la sartén
Una vez las rabas estén doradas, retíralas de la sartén y colócalas en una toalla de papel para que absorba el exceso de aceite. Esto te permitirá obtener un resultado más saludable. Finalmente, ¡puedes disfrutar de tu comida!